Editorial
Para el año 2025 Villena se va a preparar para celebrar sus 500 años como ciudad. Está claro que, a través de escritores, estudiosos y documentalistas locales, ya conocemos su pasado, sus costumbres y su desarrollo social; pero entiendo que hay que potenciar, por encima de todo relato histórico y posibles representaciones escenográficas, el estudio y análisis de como se quiere planificar el futuro de Villena. Para ello, sería interesante que la comisión que se nombre, encargada de la organización de tal evento, proyecte un estudio de futuro y defina como quiere que sea la Villena en los próximos 50 años, valorando sensiblemente los aspectos más relevantes de nuestra ciudad, sus gentes actuales, futuras y las nuevas generaciones.
Por una parte está el Plan General de Ordenación Urbana, el cual requiere una actualización y una definición, clara, razonada y concreta de cuales son las expectativas de futuro y cuales deben ser los planes de acción, de cara a un aumento de la sostenibilidad, con un deseo perenne de mejorar la calidad de vida.
De ser una sociedad procedente de nuestras antiguas generaciones, hay que tener en cuenta que nuevas culturas se han integrado en nuestras vidas, las cuales desarrollan un papel muy importante, prestando diversos servicios a la comunidad, como pueden ser: amas de casa, personal de compañía, hostelería, trabajos en sectores agrícolas e industriales, sector servicios, sacerdotes y una largo etcétera de actividades que, gracias a la inmigración, forman una parte muy importante de nuestra sociedad, por consiguiente, entiendo que estas circunstancias deben reconocerse y valorarse en una justa medida.
500 años como ciudad deben fomentar, entre los habitantes de Villena, el deseo de crear una visión de futuro, que marque como deben de ser las opciones que se ofrezcan a los ciudadanos de esta noble ciudad.
Abramos nuestros ojos y miremos al futuro, dedicando nuestras energías a mejorar el camino de las futuras generaciones. Si así lo hacemos, la celebración del 500 aniversario como ciudad, tendrá un marcado acento positivo.
Espero que nuestros representantes municipales acojan estas sugerencias con agrado y con el deseo de cumplir una de las más antiguas acciones de la sociedad: ayudar a nuestros semejantes.
Que así sea, PAZ Y BIEN.
Artículo realizado por el Centro de documentación local Veliusycía.
“Para que de aquí en adelante la villa de Villena se llame ciudad”
Madrid, 25 de febrero de 1525
Tras la muerte de Enrique IV en 1474, Isabel la Católica, hermana de Enrique IV se autoproclama reina de Castilla derrotando a Juana la Beltraneja, hija de Enrique IV.
Diego López Pacheco, marqués de Villena era favorecedor de Juana y siguió apoyándola tras el alzamiento de Isabel la Católica. Esto provocó un ataque por parte de la reina Isabel. La población del marquesado de Villena aprovechó esta situación para rebelarse por los excesivos impuestos y privilegios del marqués, ayudándose de los reyes Católicos quienes les proporcionaron fuerzas militares y finalmente la victoria.
Los “lugares” del marquesado de Villena corrieron diferente suerte, siguiendo algunos bajo el dominio de Diego López Pacheco y otros muchos perdiéndolos el marqués.
Villena, tras ser primero “Villa” y luego parte del realengo, percibió diversos favores gracias a la oposición al Marqués de Villena don Diego López Pacheco y su apoyo a los Reyes Católicos.
De ahí que le fuese otorgado el título de ciudad por don Carlos I, hijo de doña Juana I de Castilla y nieto de los Reyes Católicos.
En el miércoles 25 de febrero del año de 1525, el emperador don Carlos I otorgó a Villena el título de ciudad, en recompensa por los servicios a sus familiares y muy especialmente, a sus abuelos los Reyes Católicos.
Dicho título fue confirmado por el rey don Carlos I y su madre doña Juana, desde Toledo el viernes 6 de noviembre del año de 1525.
Repasando la Biblioteca Virtual Villenense he seleccionado varios textos y artículos relacionados con dicho nombramiento, aparecidos en varias publicaciones locales, así como sus correspondientes documentos y que cito a continuación:
Número extraordinario El Olivo titulado: VILLENA EN FIESTAS, septiembre de 1934
Su enunciado es “TÍTULO DE CIUDAD” y dice lo siguiente:
Pocos pueblos españoles podrán gloriarse de poseer el título de ciudad desde fecha tan remota, como Villena.
El rey emperador Carlos I de España y V de Alemania, le concedió esta merced el 25 de febrero de 1525, habiéndose cumplido, por consiguiente, cuatrocientos nueve años desde la fecha de la concesión.
Afortunadamente se conserva en el Archivo Municipal el documento auténtico en muy buen estado todavía, a pesar del tiempo transcurrido.
Dada la importancia de dicho documento y el interés que ofrece para todos los villenenses, hemos creído conveniente darlo a conocer a nuestros lectores, fotografiando, debidamente autorizados, la primera página del texto y dando algunas noticias de su contenido.
En su parte material consta de seis folios de vitela, con cubierta de lo mismo, apareciendo en su portada la siguiente inscripción: “Privilegio de título de Ciudad, de la Cibdad de Villena”.
Las restantes páginas de la cubierta, como también el último folio, están en blanco.
El texto, escrito todo él con letra gótica, empieza en el folio segundo con una magnífica letra inicial, hecha a pluma, así como el escudo de Villena que figura en la parte inferior de la misma. Todos estos detalles pueden apreciarse en el clisé que reproducimos. Al final de todas las páginas está la firma del rey y los folios están cogidos con un cordón de seda de varios colores, bastante deshilachado.
No pudiendo reproducir el texto íntegramente, por su mucha extensión, consignamos los puntos principales:
ENCABEZAMIENTO
“Sepan cuantos esta carta de privilegio e confirmación viesen, como nos Don Carlos, por la divina clemencia Emperador Semper augusto Rey de Alemania, Doña Juana su madre y el mismo Don Carlos, por la gracia de Dios, Reyes de Castilla, de León, de Aragón, de las dos Sicilias...”, etc., etc.
MOTIVOS DE LA CONCESIÓN
“Por Cuanto la villa de Villena y los vecinos y moradores de ella han sido siempre muy leales a nuestra Corona Real y a los Reyes nuestros, progenitores como buenos y fieles súbditos todavía hacen, especialmente a los Reyes Católicos nuestros aboelos y señores, que hayan santa gloria, en la conquista del Reyno de Granada...etc.; y lo que en servicio de nuestra Corona Real siempre hicieron, estobieron y se mostraron en nuestro serbicio en época de las alteraciones pasadas de comunidad que ovo en estos nuestros reynos, como muy buenos y leales súbditos y vasallos nuestros, et nos sirvieron en la reducción de las cibdades de Orihuela y Alicant et Xativa e Alcira, que son en el Reyno de Valencia, y estaban reveladas contra nuestro servicio, en los que murieron algunos vecinos de la dicha villa...”
CONCESIÓN
“...y porque es cosa convenible y justa que los Reyes y príncipes hagan mercedes y ennoblezcan sus villas y vasallos que con lealtad los sirvieren, para que con el ejemplo dellos otros se esfuercen y animen a hacer lo mismo, por ende acatando todo lo susodicho y porque de la lealtad e fidelidad que la dicha villa de Villena ha tenido siempre y tiene a nuestra Corona Real quede memoria y por razón de ella sea más ennoblecida, por la presente la intitulamos y es nuestra merced a voluntad que agora e de oy adelante para siempre jamás se intitule y llame Ciudad...”
FINAL Y DATA
Encarga luego a todas las demás autoridades, tanto “a los que agora son como a los que fueron de oy en adelante e a cada uno e cualquiera dellos en sus jurisdicciones que guarden e cumplan e hagan cumplir esta nuestra carta e título de Ciudad que por ella damos a la dicha villa de Villena e contra ella no vaya ninguno ni consientan ir... etc., etc., con pena de la nuestra moneda de 3 mil maravedises a cada uno que lo contrario hiciese.”
“Dada en la villa de Madrid, a veinte e cinco del mes de Febrero año del nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo, de mil quinientos y veinte y cinco años. Yo el Rey”.
Siguen después varias otras firmas y al final de ellas el sello con el escudo real.
Nota: A continuación figura el Facsímil del primer folio del documento por el que se concede a Villena el título de ciudad.
El primero se refiere al otorgamiento a Villena del título de Ciudad, extendido el 25 de febrero de 1525 en la villa de Madrid.
El segundo lleva por título “PRIVILEGIO DE TITVLO DE CIVDAD DE LA CIBDAD DE VILLENA” y fue publicado en Toledo el 6 de noviembre de 1525 y los comienzos de su texto dicen lo siguiente:
“Sepan quantos esta carta de previllegio e confirmación vieren cómmo nos don Carlos, por la divina clemencia .E. emperador semper augusto, Rey de Alemania; doña Juana su madre e el mismo don Carlos, por la gracia de Dios Reyes de Castilla, de León, de Aragón, de las dos Cecillias, de Hierussalem, de Navarra, de Granada, de Toledo, de Valencia, de Gallizia, de Mallorcas, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdova, de Córcega, de Murcia, de Jahén, de los Algarves, de Algezira, de Gibraltar, de las yslas de Canaria, de las Yndias, yslas e tierra firme del mar Océano, Condes de Barcelona, señores de Vizcaya e de Molina, duques de Athenas e de Neopatria, condes de Ruysellón e de Cerdania, marqueses de Oristán e de Gociano, Archiduques de Abstria”.
“E de esto vos mandamos dar e dimos esta nuestra careta de privillegio e confirmación escripta en pargamino de cuero e sellada con nuestro sello de plomo pendiente en filos de seda a colorese librada de los nuestros concertadores e escrivanos mayores de los nuestros privillegios e confirmaciones e otros oficiales de nuestra casa. Dada en la cibdad de Toledo, a seys días del mes de noviembre, año del nascimiento de nuestro saluador Ihu. Xpo de mil e quinientos e veynte e cinco años...”
Interesantísimo artículo publicado en la revista anual Villena de 1958 y titulado “Villena y el Emperador Carlos I”, que escribió José María Soler García, cronista de la ciudad y en dicho trabajo se da cuenta del comienzo y restauración del histórico Castillo de la Atalaya, uno de los Monumentos Nacionales de la provincia de Alicante.
Finaliza el artículo con el escudo de Villena que figura en la orla del privilegio de confirmación y acaba con las siguientes palabras:
“La reconstrucción del castillo de Villena se ha iniciado, importante señalar la fecha, en este año jubilar de 1958. Nunca hubiera podido soñarse homenaje más condigno a la memoria del Emperador Carlos I en este cuarto centenario de su óbito.
Y hasta aquí, un pequeño resumen a través de varios artículos publicados en Villena, referidos a la concesión a Villena del título de ciudad, por parte del emperador Carlos V.
5 comentarios:
Excelente recopilación de documentaciones que nos conducen a tener un conocimiento fehaciente de todo lo que sucedió. Felicidades, Pepe Navarro.
Maravilloso reportaje, me alegro de conocer con detalle todo lo que sucedió. Sigue así, Tony Gómez.
Un buen resumen y excelente trabajo, enhorabuena. Un saludo de Alejandro.
Magnífico trabajo de recopilación de informaciones relacionadas con la concesión del título de ciudad.
Enhorabuena por la realización de tan gran trabajo de investigación.
Buen trabajo, claro y sencillo. ánimo.
TGI
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