Interrogatorio del Proyecto de Contribución del Marqués de la Ensenada, Villena 1755.
Consta de cuarenta
preguntas, si bien, al igual que hicimos en el punto anterior, nos vamos a
centrar en las relacionadas con los aspectos religiosos de nuestra ciudad.
“Se contesta que en Villena existían cincuenta y
tres eclesiásticos presbíteros, comprendidos en las dos parroquias y ocho
ordenados de menores.
En nuestra ciudad existían en aquel tiempo tres
conventos. Dos dentro del casco urbano, uno de religiosos de San Francisco y su
comunidad estaba compuesta por diecinueve sacerdotes, siete legos y tres
donados; y el otro de Religiosas Trinitarias Calzadas, con veinticuatro
profesas, dos novicias y cinco legas y el tercero, extramuros distante una
legua, denominado Nuestra Señora de las Virtudes de Religiosos Agustinos
Calzados, con once sacerdotes, seis legos, dos novicios y un pretendiente”.
Interrogatorio
realizado por Supremo Consejo de Castilla y remitido al Corregidor de Villena,
para su contestación. Madrid, 26 de febrero de 1771.
“En la ciudad de Villena hay dos iglesias
parroquiales: la una la de Santiago, dicha Arcedianal: tiene diferentes
fundaciones de Capellanías y diez Beneficiados, que cobran rentas de las
tercias decimales de la ciudad de Lorca y de la villa de La Gineta, en donde
ponen Cura Párroco, y tienen renta por quinquenio, cada uno mil ducados.
La otra parroquia es Santa María de la Asunción, con
seis Beneficiados.
Cada una de estas Parroquias tiene su Cura nombrado
por el Ilustrísimo Señor Obispo.
Tiene también un Oratorio de San Felipe Neri -iglesia de la Congregación-.
Un hospital para enfermos pobres y recogimiento de
viandantes.
Un Convento de Religiosos Agustinos, otro de
Franciscanos Descalzos y otro de Religiosas Trinitarias Calzadas.
Una ermita de San José que sirve de ayuda a la
Parroquia de Santa María, otra de San Antonio Abad que lo es de la de Santiago.
Otra en el Castillo que está con plaza de armas, foso y contrafoso, la que
antiguamente fue parroquia.
Además hay ocho ermitas en la Ciudad y en los Campos
y heredades hay otras muchas.
La feligresía de ambas Parroquias la componen 2.100
vecinos, 900 en Santa María y 1.200 en Santiago.
El Patronato de las Parroquias y Ermitas no
corresponde a persona alguna; bien que el nombramiento de los Beneficiados de
Santa María le pertenece a Don Diego Ochando; la Capilla Mayor de Santiago a la
Casa de Rodríguez de Navarra, que hoy por entronque la posee el Conde de
Moctezuma y Marqués de Tenebrón.
El Patronato del Convento de Agustinos corresponde a
la Ciudad, con el derecho de mandar mudas los Frailes o pasarlos a otra
religión”.
Diccionario Geográfico-Histórico-Estadístico de Pascual Madoz, Madrid 1849.
De las cinco plazas que
había en nuestra ciudad, en tres de ellas, había edificios religiosos: la de
Santiago, que formaba un polígono de 4.584 varas cuadradas; la de Santa María
un heptágono de 1.125 varas y la de San Antón con 756.
Unos datos muy
interesantes sobre las dos parroquias nos da a
conocer Madoz y dice así:
“Hay dos iglesias parroquiales, la arcedianal
(Santiago), de término fundada en virtud de concesión del papa Julio II en el año
1544 por D. Sancho de Medina, canónigo maestre-escuela que fue de la Sta.
Iglesia de Cartagena, según unos; pero otros limitan la concesión de dicho Papa
a la erección de 40 beneficios que hay en esta iglesia., y que remontan la
antigüedad de ella a tiempos anteriores. Esto es lo más seguro según se
desprende de la bula dada por el Papa citado, en la que se adjudican la iglesia
parroquial de la Gineta y los beneficios que D. Sancho poseía en Lorca, a la
erección de los 40 beneficios que Medina suplicó y consiguió fuesen creados. De
los 40 beneficiados, uno debía enseñar gramática latina y lógica; otro moral; y
el tercero, música y órgano.
La advocación de la segunda parroquia es la de Santa
María de la Asunción de segundo ascenso, servida por un cura y seis capellanes
con el nombre de Cabildo: fue fundada por Doña Catalina de Alarcón en el año
1554.
Ambos curatos son de provisión real en terna que por
rigorosa oposición presenta el ordinario, habiendo pertenecido siempre a la corona el patronato
de las dos iglesias.”
Continúa la crónica indicando que dentro de la
población se encuentran dos conventos: uno que fue de Franciscanos Menores
Descalzos -cuyo edificio es de propiedad particular, por haber sido enajenado
con arreglo a las leyes vigentes-; y el otro de las Monjas Calzadas que
subsisten todavía con una comunidad de 46 religiosas.
Cita también el convento de Agustinos Calzados que
se halla en estado ruinoso, distante una legua de la ciudad, tiene un capellán
que se sustenta con las rentas y limosnas para el servicio de su iglesia en la
que se venera como patrona, la imagen de Ntra. Sra. de las Virtudes.
Finaliza este apartado dedicado a los edificios
religiosos indicando las ermitas que existen: Santa Lucía, Santa Bárbara, San
Bernabé, San José y San Bartolomé, esta última situada a corta distancia de la
población y que se halla en estado ruinoso y sin rentas.
Observamos que no cita la ermita de San Antón, ni el
Oratorio de la Congregación de San Felipe Neri”.
Manual Geográfico de la provincia
de Alicante
-Libro de Lectura para Escuelas, por P. Orozco Sánchez. Alicante, 1878.
Tras una indicación de los datos geográficos y sociológicos de nuestra
provincia, el libro de divide en capítulos, cada uno de ellos relacionado con
un partido judicial de la provincia.
Nos centramos a continuación en el partido judicial de Villena, y más
concretamente sobre nuestra ciudad, con el fin de conocer qué datos se nos
ofrecen de los edificios religiosos de nuestra ciudad y algunas de sus
características.
“Villena pertenece a la diócesis de Cartagena y es
cabeza de arciprestazgo con Almansa, Yecla y Sax. Dista 105 kilómetros de Cartagena y 50 de Alicante.
Pasando a describir las particularidades de esta
ciudad, merecen mencionarse, por su indisputable mérito, la iglesia parroquial
de Santiago; notable por su arquitectura, por sus espaciosas naves y sobre todo
porque su elevada torre descansa sobre el arco que forma la puerta de la
sacristía. La de Santa María, en cuya capilla Mayor fue sepultada Doña Catalina
Ruiz de Alarcón.
Las ermitas de San Juan, San Benito, San Bernabé y
otras; así como el convento de Monjas Trinitarias y, distando 6 Kms de la
ciudad, hallase un ex convento donde se venera en suntuoso camarín la Virgen de
las Virtudes, que es la patrona”.
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