Escrito que envía N.N. a la prensa referido a unas actuaciones
musicales de un grupo de niñas de Villena y reclamando el que se construya un
teatro en Villena
Antes de
tratar de la revista o entrar en ella, bueno será que haga mención de algo que
aunque ajeno parezca, es completamente del caso y nunca con mayor oportunidad.
“En
la última visita que nos hizo nuestro paisano (gloria y honra de nuestro
pueblo) don Ruperto Chapí, se trató de la fundación de un teatro que
correspondiera a lo que es y merece la población; aunque vergonzoso es decirlo, carecemos de él; así
como de la organización de una buen a banda de música (pensamiento propuesto
por varios, en banquete con Chapí, a él dedicado) y aceptado luego, con
entusiasmo general por todos; la emoción en aquellos días embriagaba a los hijos de este pueblo, y yo
el primero (sabedor luego) que mee regocijaba con tan laudable empresa; todos
me dijeron se convino fuera terminado para el próximo mes de septiembre, en el
Santo de nuestra patrona la Virgen de
las Virtudes, en que había de celebrarse el cuarto centenario de su aparición;
al efecto nuestro paisano Chapí se comprometió también a que en ese día se
estrenase y el vendría a dirigirla, una zarzuela por él compuesta que dedicaría
a Villena, para ser representada en la inauguración del Teatro en proyecto.
Todo
así pasó: se recogieron firmas para la adquisición de acciones mejor dicho,
repartimiento en número tal, que bastan indiscutiblemente para emprender y
terminar la obra por difícil y costosa que sea; se nombró al efecto una
comisión que se encargara de la parte activa, administración, dirección, etc. y
así quedó.
Ahora
pregunto yo: ¿Qué hace esta comisión? ¿En qué ha invertido este tiempo transcurrido?
¿Cómo es que van sobre nueve meses vencidos desde que tales proyectos se
expusieron, se aprobaron, recogieron firmas distribuyendo las acciones, etc. y
es más, hasta el pueblo o municipio en representación, creo concedió local para ello y hoy ni se
sabe nada, ni nada creo que se ha hecho desde entonces? ¿Qué hace esa comisión
inactiva que otra cosa no puede decírsele? ¿Es que no son hijos de Villena o
que no aprovechan para el caso? Si es esto último, que lo digan claro, pues
creo sean bastante las pruebas, y sin son forasteros, la inmediata es echarles
fuera.
La
verdad es que no me explico este proceder, y ya no tan solo me refiero a la
comisión honrada con tal designación, sino a las personas autorizadas, a las
personas competentes, como son las de posición, bien por su propia posición,
por su autoridad, o por la influencia que pudieran ejercer acerca de todo este
asunto a todos esos señores que desaparezca esa indiferencia, esa apatía,
despertar de ese letargo, despertemos y oigamos las voces del pueblo que justa
y merecidamente nos pide y nos reclama todo aquello que le pertenece y dado lo
suyo nos ahorraremos las censuras del forastero, y la vergüenza de ver pueblos
inmediatos, de una octava parte de vecindario, que disfrutan y tienen lo aquí con
más medios en términos generales no tenemos, demostrando así, lo que yo no
creer sea más patriotismo, más amantes del engrandecimiento y del adelanto,
todo por y para su pueblo…”
Continúa el escrito haciendo mención
a las actividades musicales celebradas y comienza con la noche del día 17, en
la que un grupo de niñas tuvieron que representar sus trabajos sobre música y
teatro en una casa particular, concretamente en la de don Pedro Zúñiga.
Se dio comienzo a la función anunciada, con la
sinfonía de Dinorah, que fue
ejecutada a cuatro manos por las señoritas Laura Esteve y Ángeles Marco.
En la
segunda parte se representó la zarzuela en un acto con letra y música de don
Isidoro Hernández, La virtud premiada, interpretada
por las niñas Amparo Ritas, Rosario Zúñiga, Magdalena Sánchez, Bienvenida
García e Isidora Martín.
Tercera parte y otra zarzuela, titulada Choza y palacio, con música y letra de
M. Perillán. Actuaron las niñas María Juan, Agustina Candel, Amparo Ritas,
Isidora Marín, Consuelo Soler, Rosario Zúñiga, Adela Ritas, Pepita Hernández,
Magdalena Sánchez, Salvadora Candel, María Amorós y Pepita Sellés. Se indica
que pese a la corta edad tuvieron gran acierto y naturalidad en la
interpretación.
Pasamos a la cuarta parte con un caprichoso
monólogo que realizó la niña Amparo Ritas, quién llamó al actor y en ese momento apareció en escena el estimado paisano don Aquilino Juan Ocaña,
siendo muy bien acogido por el público.
En la quinta parte otra zarzuela, por título Artistas en miniatura, obra en un acto y
letra y música de don Isidoro Hernández, en la que intervinieron las niñas
Pepita Hernández, Salvadora Candel, Consuelo Soler, María Juan, Agustina
Candel, Rosario Zúñiga y Adela Ritas.
Conclusión final: las niñas se lucieron, vistieron
elegantes trajes, sus papás muy orgullosos, y recordar que Laura Esteve tuvo
que aparecer en uno de los entreactos, a petición del público.
Finalmente se indica que la función terminó más
tarde la una de la madrugada y a la vista del éxito conseguido, quedaron para
repetirla al domingo siguiente.
Firma el
artículo N.N., lo fecha en mayo de 1884 y
El Constitucional Dinástico, lo publica el 5 de junio de 1884.
Notas de quien ha resumido este texto:
La visita que
hace mención de Ruperto Chapí a Villena, debió de ser la cuarta visita que
realizó a finales de julio de 1883, en la que vino acompañado de su familia,
siendo agasajado por el ayuntamiento presidido por don Luis García
Poveda.
Considero que
para narrar una fiesta musical, que probablemente sería con motivo de un final
de curso, no hacía falta que el tal N.N. metiera en la primera parte de su
escrito ese rollo soporífero sobre la necesidad de un teatro en Villena. Las iniciales corresponden a Nazario
Navarro Zúñiga, que fue director del semanario villenense El Activo – órgano de la
izquierda liberal y defensor de los intereses morales y materiales del distrito
electoral de Villena. Este periódico comenzó a publicarse en 1884.
Respecto a
las niñas, indicar que Bienvenida García es la madre de don José Mª Soler
García e Isidora Marín la hermana del poeta villenense Antonio Martín Requena
(información facilitada por César López Hurtado).
(Isidoro
Hernández fue un compositor andaluz, nacido y fallecido en Sevilla
(1840-1888). Siendo todavía muy joven, se trasladó junto con su familia a
Madrid, lo que le permitió entrar en contacto con el mundo del teatro
musical, introduciéndose con rapidez en el mundo de la zarzuela. Compuso
varias zarzuelas, que si bien en su momento tuvieron éxito y repercusión,
posteriormente han sido totalmente olvidadas, y entre las que merece destacar Un Sevillano en La Habana (1872), El Lavadero de la Florida (1881)
y la obra a la que puso texto Rafael María Liern Efectos de la Gran Vía (1887).
Como gran aficionado que era de la tauromaquia, introdujo en los
argumentos de sus zarzuelas cuantas menciones podía respecto al mundo de los
toros).
http://www.geocities.ws/mizarzuela/hernandezisidoro.html
|
El Constitucional dinástico, 05-06-1884
La Tempestad en el Teatro Principal de Alicante
Por una parte
se indica que esta noche se estrena la temporada en dicho teatro y en otra
denominada “Espectáculos” figura la inauguración hoy 25-10 con la puesta en
escena de dicha zarzuela, en tres actos, en prosa y verso, original de Miguel Ramos
Carrión y música de Ruperto Chapí.
El Serpis,
25-10-1884
Estreno de El milagro de la Virgen
En el Teatro
de Apolo se estrenó El milagro de la Virgen. El maestro Chapí,
autor de la música, ha demostrado una vez más su maestría. Haciendo lo que
Moliere y otros autores, han tomado los motivos de donde mejor se han
presentado pero al proporcionárselos y al darles nueva forma ha revelado
verdadera inspiración. ¡Qué riqueza de instrumentación! ¡Qué colorido! Es un
artista; El libro peca de inocente; pero se ve que su autor conoce la escena.
Hace años esta zarzuela habría conmovido al auditorio. Ahora la gente prefiere
reír o llorar.
El Eco de Cartagena, 11-11-1884 (apartado: Ecos de Madrid)
No hay comentarios:
Publicar un comentario