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Itinerarios musicales de Chapí - 1880


       
Nuevo trabajo de Chapí en el Clásico Teatro Español

En el clásico Teatro Español empezarán pronto los ensayos de un melodrama lírico, de espectáculo, en tres actos, libro de don Mariano Pineda Domínguez y música de don Ruperto Chapí.
El libro, según nuestras noticias, está tomado de la novela francesa de Ponson de Tersail, titulado Los dramas de París.

La mañana, 08-01-1880

ZARZUELA LAS DOS HUÉRFANAS

Zarzuela en tres actos, libro del señor Pinas Domínguez y música de don Ruperto Chapí, estrenada en el teatro de la calle de Jovellanos, no ha satisfecho por completo a los amantes del arte. Nadie esperaba más del señor Pina; pero todos, artistas y aficionados, esperaban mucho más del señor Chapí.

Ocupándonos solamente de la música, diremos que ésta se reduce a unos compases de introducción, un coro, coplas del afilador, dúo de tiples, coro y final en el primer acto; coro de agentes de policía, coplas del Doctor, coro del mercado, coplas de los generales Pan, Pen, Pin, Pon, y final en el segundo; y preludio, romanza, dúo de tiple y tenor y final en el tercero.

 El juicio que nos merece el trabajo del señor Chapí es favorable por regla general; pero estamos muy conformes con los que esperaban mucho más de un joven de las condiciones del expensionado de España en Roma. Quien ha hecho Roger de Flor, la Serenata morisca y otras varias obras notables que le han dado la justa fama de que hoy goza, tenía el deber de haber cuidado mucho más la factura, y sobre lodo la propiedad, de la primera zarzuela que presenta al público. Al señor Chapí se le debe decir la verdad por lo mismo que es un maestro ya formado, y nosotros, que le apreciamos muy de veras y vemos en él una gloria nacional, no se la hemos de ocultar.

 Huyendo de la vulgaridad, el señor Chapí deja reducidas algunas piezas a un solo tiempo, y el discurso musical parece que queda cojo. Si diera á esos tiempos un desarrollo conveniente, nada se le podría objetar; pero no lo hace, y la idea musical queda a veces sin desarrollo. La propiedad resulta algunas veces también sacrificada, y recordamos algunos trozos en que ha buscado el efecto propio de la escena en el tono menor que emplea y no en el carácter de la melodía.

 Sentimos que la falta de espacio nos impida analizar detenidamente la obra del señor Chapí, en la cual confesamos que hay bellezas y que desde luego revela la experta mano que la ha compuesto. Acaso algunos de nuestros colaboradores se encargue otro día de esta tarea. Por de pronto, hemos creído de nuestro deber, y en obsequio del mismo señor Chapí, no entusiasmarnos con los aplausos que le ha tributado el público, y llamarle la atención sobre las principales tendencias que observamos en su obra.

De la ejecución vale más no hablar.
 BONIFACIO
Crónica de la música, 29-01-1880

Dos huérfanas

En el teatro de la Zarzuela cantan, hace algunas noches, Dos huérfanas y el público las aplaude con entusiasmo.
A pesar de ser huérfanas, Mariano Pina (hijo) y Ruperto Chapí, que andan por esas calles tan gordos y tan contentos, aseguran que son sus padres.
¿Lo comprendéis? Id a verlas, y de seguro haréis lo que todo el mundo; aplaudirlas, y llamar a la escena, para aplaudirlos también a los padres de esas afortunadas huérfanas.

Madrid Cómico, 01-02-1880

Más sobre Dos huérfanas

            El distinguido maestro Chapí ha introducido en su obra Dos huérfanas, una importante modificación. El cuadro tercero titulado La orgía, ha sido puesto en música en su totalidad, con objeto de darle mayor vida y realce. El sábado se estrenará, según tenemos entendido.

La mañana, 06-02-1880

Oratorio Los Ángeles      

Al pensionado de mérito por la música en la Academia de Bellas Artes de Roma. Don Ruperto Chapí, aunque reside en Madrid cumple perfectamente los deberes que le impone el reglamento de la Academia en lo relativo a la composición de obras, y en este concepto ha escrito recientemente la partitura de un oratorio titulado Los Ángeles, cuyo libreto original de nuestro querido amigo y colaborador don Antonio Arnao, Académico de la Española y de Bellas Artes, tenemos el mayor gusto en publicar en éste número.

Crónica de la música, 26-02-1880

AUDICIONES Y CONCIERTOS, ORATORIO LOS ÁNGELES, BIOGRAFÍA DE CHAPÍ

En  honor del eminente artista Sarasate y para dar a conocer el oratorio Los Ángeles, del señor Chapi, ha dado el Sr. Arrieta en el Salón-teatro del Conservatorio un gran concierto vocal e instrumental, cuyo recuerdo se conservará por largo tiempo en la memoria de todos. Perfectamente organizado, bien dirigido y compuesto de obras escogidas, fue de los conciertos más brillantes y agradables que hemos presenciado.

El oratorio de Chapí, cuyo libreto conocen nuestros lectores, fue muy aplaudido. Es una obra de formas severas y acentuadas, que demuestra mucha ciencia y no poca inspiración. Especialmente la parte instrumental está muy bien tratada y ofrece trozos bellísimos que conmueven hondamente al auditorio. Hay bastante sentimiento, por regla general, en toda la obra, y domina en ella la expresión verdaderamente religiosa, aunque en la tendencia algo dramática que caracteriza á esta clase de composiciones.

 De la región del Oriente sale un ángel de alas de fuego y deslumbrante vestidura; cruza rápidamente los aires; el sonido de su trompeta de oro llena la tierra. Para describir esto ha escrito el señor Chapí un trozo instrumental inspiradísimo, que en nuestro concepto es el más notable del oratorio. También el coro de los mortales implorando perdón es de gran efecto.

El público aplaudió todos los números y tributó merecida ovación al señor Chapí, a las señoritas Buireo y Massanet, a los señores Blasco y Orenga, y a las alumnas del Conservatorio que formaban el coro.

 Ruperto Chapí nació en Villena, pueblo de la provincia de Alicante, y en cuanto tuvo la edad suficiente se trasladó á Madrid y entró en el Conservatorio, estudiando armonía con don  Miguel Galiana, contrapunto con don Tomás Fernández, y composición con el ilustre autor de Marina don Emilio Arrieta, que ha sido y continúa siendo su verdadero maestro y su protector.

 Joven de diez y nueve años, y después de haber obtenido primeros premios en sus estudios, ganó por oposición la plaza de músico mayor del tercer regimiento de artillería. Consagrado a este ejercicio se hallaba, cuando un fausto suceso vino a imprimir nuevo y poderoso impulso a las artes españolas. El señor Castelar, Ministro de Estado del Gobierno de la República, cuyo buen deseo y excelente servicio no ha sido bastantemente elogiado, fundó en 1873 la Academia de Bellas Artes de España en Roma, y en esta obtuvo Chapí en público certamen la pensión de número por la música.

El 11 de mayo de 1876 se puso en escena en el teatro Real de Madrid el primer trabajo de Chapí como pensionado, el cuadro lírico La hija de Jefté que fue muy aplaudido. Antes se había puesto en el mismo teatro, dirigiendo la orquesta el mismo Chapí, el cuadro lírico Las naves de Cortés, que fue el tema del concurso para la pensión de Roma. Y más tarde, el 11 Febrero de 1878, subió también a la escena del teatro Real la ópera en tres actos Roger de Flor que Chapí compuso en Roma en el tercer año de su pensión. Estas obras difundieron el nombre del joven compositor como una gran esperanza para el arte.

La esperanza empieza á realizarse…

(Cuando se escribe esta crónica Chapí tiene 29 años)

Crónica de la música, 25-03-1880

TEATRO CIRCO: Dos Huérfanas

 Es el título de la zarzuela representada anoche en este coliseo.  El libro es un arreglo de otro francés llevado a cabo por el señor  Pina Domínguez y la música del maestro Chapí.

En su desempeño como siempre se distinguieron las señoritas  Di franco y González, señora Baeza y señores Dalmau, Ferrer Tormo, Banquells y otros cuyos nombres no recordamos.

De las piezas musicales de que consta la obra, merecen particular mención el dúo de tiples del acto primero que con notable gusto y afinación ejecutaron las señoras Di franco y González; el coro de introducción del acto segundo que mereció los honores de la repetición, así como las coplas cantadas por el señor Tormo y la parte de barítono del predio acto en que estuvo inimitable el Sr. Ferrer.

Según tenemos entendido muy en breve se pondrá en escena la zarzuela melodramática titulada El Salto del pasiego. 

El eco de Cartagena, 15-06-1880

Liceo Brigantino

            Se da cuenta de la comisión nombrada para el Certamen musical y en la relación del Jurado de composición figura don Ruperto Chapí. 

La ilustración gallega y asturiana, 08-07-1880

Chapí en el Jurado musical de composición

El Jurado musical de composición constituido en Madrid para juzgar las composiciones enviadas al certamen de Pontevedra, por los señores don Emilio Arrieta, don Rafael Hernando, don Ruperto Chapí, ha pronunciado veredicto concediendo el premio, consiste en una rosa de oro y platal, al autor del himno A Pontevedra, cuyo lema es “Recuerdos juveniles” y el accésit al del lema Benedícite omnia opera, etc...,

La Ilustración gallega y asturiana, 08-08-1880

Dos crónicas del estreno de Música Clásica en Madrid

La Comedia ha estrenado una divertidísima zarzuela que se titula Música Clásica. Estremera, su autor, ha logrado eslabonar los chistes con tanta oportunidad desde el principio hasta el fin, que el público se ríe sin parar. La música de Chapí es preciosísima.

Empezó la semana con la inauguración del precioso Teatro de la calle del Príncipe y con ella el estreno de un juguete titulado Música clásica, que obtuvo un completo éxito. Los autores fueron llamados á escena y puede decirse que pocas veces se alcanza un éxito tan justo y merecido como el que obtuvieron los señores Chapí y Estremera. La música es toda preciosa y el libro, lleno de chistes tan delicados como espontáneos, conserva al público en continua hilaridad. La ejecución esmeradísima por parte de Rosell y la García, Videgain cumple también su encargo.

El eco de Cartagena, 24-09-1880 y 28-09-1880

Música Clásica

Es preciso lectores míos, que vayáis al de la calle de Príncipe a oír Música Clásica. Es una joya. No tiene desperdicio.
Estremera y Chapí, autores del libro y música respectivamente, se han unido de tal modo, que parece la obra de uno sólo; esto es, que Estremera es poeta y compositor, o que Chapí es compositor y poeta.
La ejecución es inmejorable. Me parece que se hará algunas noches. Hay tiempo de verla.

Madrid Cómico, 26-09-1880

LA CALLE DE CARRETAS MÚSICA CLÁSICA

Dos noticias relacionadas con Chapí. La primera indica que el maestro está terminando la música para la zarzuela que titulará La calle de Carretas, obra en tres actos y que la destina al teatro de la calle de Jovellanos.
Música clásica es una joya artística, en la que el señor Chapí ha puesto los brillantes y el señor Estremera el estuche. El éxito se debe por entero al compositor, pues si es verdad que el libro tiene algunos chistes, no es menos cierto que lo trivial y gastado del asunto no lo hubieran hecho pasar de la segunda representación, si el señor Chapí no hubiese escrito una música tan bella en la parte original, como artísticamente tejida en la parte que ha entrelazado temas de autores clásicos.
La señora García desempeñó su papel con inimitable gracia, así como el señor Videgain. El señor Rosell es inútil decir que demostró una vez más ser uno de los pocos y verdaderos actores cómicos que quedan.

Crónica de la música, 07-10-1880

Oratorio Los ángeles

La Sociedad Artístico-musical de Socorros mutuos ha dado al público la circular en que manifiesta el propósito de organizar el festival de Santa Cecilia.

Como obra final figuraba el oratorio Los ángeles, poesía de don Antonio Arnao y música de don Ruperto Chapí.

La Correspondencia de España, 13-11-1880

La calle de Carretas

            La calle de Carretas, aligerada de todo lo que el público encontró de más la noche del estreno, ha entretenido agradablemente, sobre todo el primer acto, que es sin duda el mejor de la obra.

            La música de Chapí, es…música de Chapí, esto es, de primer orden. Ya puedo uno embarcarse con él y atravesar sin miedo el océano de cabezas humanas que se llama público, en la seguridad de no ahogarse. Es un gran piloto. Cuando canta, “su música las fieras domestica”.

Madrid Cómico, 28-11-1880

Estreno de la zarzuela: la Calandria,  en la Alhambra

Un éxito, y un éxito verdadero, hemos presenciado con el estreno de La Calandria, zarzuela en un acto de los señores  Ramos Carrión y Vital Aza, música de Chapí.

El libro es graciosísimo, y sus chistes, casi todos de buena ley, mantienen al público en constante hilaridad. Hay en toda la obra gran animación y verdadera vis cómica. La Calandria dará entradas y cantará... en la mano muchas noches.

Los personajes están bien presentados. El cesante es un tipo notable; la cantaora flamenca parece realmente trasladada al escenario de las Folies desde un café del barrio del Sur; el torero de invierno está perfectamente dibujado; la patrona recuerda, sin querer, los ayunos de las casas de a 6 reales con principio... de anemia.

La música es agradable, juguetona y ligera. No hay en ella gran inspiración, y algunos de sus números, —los couplets del cesante, por ejemplo, —recuerda los del bravo general de Dos truchas en seco. Pero está bien instrumentada; tiene un cuarteto perfectamente pensado y desarrollado, y la canción de La Calandria es de muy buen efecto.

 La ejecución de esta obra es sobresaliente. Las señoras Bardan y Delgado, especialmente la última, muy bien. Arderius, Escriu y Orejón verdaderamente inimitables en sus respectivos papeles.

 El público aplaude todas las noches a los autores y a los actores, y nosotros nos complacemos en poder elogiar esa producción, ya que hasta ahora tan pocas ocasiones hemos tenido de dedicarnos a esta agradable tarea.
MARTIN GIL.
Crónica de la música, 30-12-1880

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